40 minutos perdidos por una tontería

Ayer hice el enésimo formulario de búsqueda (son aburridos de narices). Uno que me hacía falta para un usercontrol que forma parte de un asistente (vulgo, siguiente-siguiente-siguiente) que no sé en qué feliz día se me ocurrió que sería una buena idea. Hoy he embutido el usercontrol en un formulario de pruebas, para comprobar que hace lo que debe, y de paso ir ajustando tanto el usercontrol como el formulario de búsqueda: orden de tabulación, ámbito de los controles, propiedades varias.

En una de esas, el formulario de búsqueda ha decidido pasarse el ShowDialog por donde le da la gana y cerrarse sin hacer lo que debiera. Vale, partiendo de que no puede hacer eso, o sea, el ShowDialog es sagrado y que antes funcionaba, queda claro que alguien ha metido la pata. Como yo no he sido, la culpa debe ser, por narices, del manazas que comparte silla, ordenador y cuerpo con un servidor. Seguro que jugando con las propiedades de algo ha cambiado lo que no debía por error, y ahora no recuerda.

40 minutos después, 40 jodidos minutos de romperme la cabeza y revisar todos los controles (porque en ejecución paso a paso nothing de nothing) encuentro la causa: botón que tiene la propiedad DialogResult a algo que no es None. Creo que tocando algunas cosas del formulario asigné como AcceptButton o CancelButton al botón, luego lo quité, pero la propiedad DialogResult del puñetero botón siguió asignada.

En fin, el diseñador de Visual Studio ahorra trabajo, pero a veces dan ganas de pasar de él y escribir el código uno mismo.

Área de clientes de grandes empresas

Hay días que me siento muy cansado, mentalmente exhausto. Puedo llevar media jornada y ya no doy más de mí para el resto del mes.

Coincide siempre cuando tengo que hacer algo en el área de clientes de una gran empresa: Telefónica, Iberdrola… Lo odio. Mucho. Páginas que no cargan, que dan error tres veces de cada cuatro, que tardan una eternidad en mostrar la información (una factura, por ejemplo, y eso tras intentarlo varias veces), secciones permanentemente «muertas», confusas, mal diseñadas, opacas… Inútiles, incluso: malas como consulta, imposible hacer ninguna gestión. Hay veces que llego a una página útil y luego no la vuelvo a encontrar. Toca no pensar en enlaces y caminos lógicos y rastrearlos uno por uno, con gran paciencia.

Es algo común en grandes empresas: competir por ser la más oscura e impenetrable, no sea que el cliente vaya a hacer algo por su cuenta. Sería terrible que, por ejemplo, un usuario pudiera informarse y gestionar qué productos quiere contratar o dar de baja con facilidad. Es mejor desanimarle a través de desinformación y miles de teléfonos (902 al menos, si es posible 806) donde nadie tenga ni idea de cómo gestionar (o ni siquiera qué es, habitual cuando tienes un problema, no sabes el número de teléfono de asistencia técnica que te corresponde e, iluso, llamas a atención al cliente suponiendo que sabrán darte esa información) lo que uno busca.

De las áreas de cliente con las que me tengo que pegar se salvan bancos y algunas empresas medianas (proveedores nuestros, vaya).

De cien tapas de mesita…

Tengo delante de la máquina dos montones de tapas de mesita esperando a ser mecanizadas. De estos dos montones he cogido una para ajustar el programa: tras la reparación tiene el origen de coordenadas un pelín desplazado y hay que revisar todos los programas. Además, la pieza entra a medias exactas y los ejes de la bancada no coinciden exactamente (un milímetro por metro, aproximadamente) con los del brazo. Seguramente será cosa de topes mal alineados y tal.

En fin, que cojo una de las tapas, le meto el programa, mido, ajusto el milímetro o medio milímetro que sobra o falta acá y allá. Cojo la primera tapa de serie para asegurarme de que todo esté bien antes de que se ponga el operario y… los taladros de uno de los lados están a 1mm más del borde que en la tapa de preserie. El rebajo de ese lado tiene 1mm más de profundidad.

Juro en arameo. Mido las dos tapas. La primera, 531mm. La segunda, 532mm.

Voy al montón, mido una docena o así de tapas.

He cogido la única puñetera pieza que mide 531mm.

Manda carallo…

Resulta que el compadre Souto, compañero moderador de ForosWindows, se curra un tutorial sobre cómo instalar XP en ordenadores que traen Vista instalado (tema muy común en el foro), por amor al arte, para los visitantes del foro.

Resulta que se lo han fusilado. Copiado. Palabra por palabra. Coma por coma.

Esto, de por sí, no es malo. El problema es que lo han hecho:

  1. Incumpliendo la licencia, que aparece en el mismo.

  2. Ni siquiera han tenido la decencia de citar el autor y la fuente.

Independientemente del tema de la licencia (no soy partidario del copyright, pero eso es decisión del autor) me parece muy feo, muy triste y de una enorme bajeza moral apropiarte del trabajo de otro para hacerlo pasar como tuyo.

¿Dónde están (estamos) los pringaos?

Comentaba el Tendero hace unos días que el nivel de los pringaos ha bajado muy mucho. Y estoy totalmente de acuerdo con él: el foro lleva meses sufriendo una plaga de consultas de gente que ha destrozado su ordenador metiendo un XP pirata, normalmente un truñing edition (uE, Colossus o qué sé yo) sin tener ni la más mínima idea de lo que hacían. Tenemos desde el que formatea y luego dice que no encuentra los documentos que antes tenía en el disco duro al que cree que la tecnología no avanza y lo intenta igual que si fuera un W98 (arrancar con el CD de instalación de W98 para formatear el disco duro y luego lanzar, desde MS-DOS, la instalación de XP, todo esto para quitar Vista de un portátil recién comprado); el que no es capaz de configurar el router (no ha instalado ningún driver, ni sabe qué son); quien tiene problemas para lanzar el proceso de recuperación de su ordenador (XP) y, antes de contemplar el llevarlo a un profesional o buscar otras soluciones, se cepilla todo con un XP pirata y luego se queja de que… es pirata (le sale la estrellita de Windows Genuine).

Y si ya pasamos a amigos, amigas, novios, cuñados y demás metepatas yo de esto sé mucho que caen sobre los indefensos ordenadores como plaga de langosta (y los dejan exactamente igual: totalmente arrasados), no acabaríamos nunca.

En fin, ya sé que ya traté este tema, pero es que cada día alucino más. ¿Qué nos deparará el futuro, cuando salga Windows 7? Si estos lusers metepatas se pasaran a Linux, ¿qué pasaría (yo me hago una idea: no hay sistema que aguante esto)?

Cada día me alegro más de sólo tener que ocuparme de la red local de mi empresa.

Bueno, y la Dama, las facturas, los albaranes, tirar cables, programar ordenadores de riego…

Parece que la cosa ya marcha

Parte del día: uno de los topes sube muy lentamente, lo que ralentiza el ritmo de trabajo (los topes son una serie de pistones que se suben para colocar la pieza, a modo de guías; luego se bajan antes de poner en marcha la máquina; el que falla es uno remendado después de que a alguien se le olvidara bajar los topes al hacer una pieza: la fresa del mandrino principal se lo llevó por delante).

Por lo demás, TODO OK. Los taladros horizontales tenían bien el origen de coordenadas (mi miedo: tengo en mi haber un agujero en la bancada y una pieza arrancada con el taladro horizontal). Poco a poco (muy poco a poco, la verdad) nos vamos poniendo en marcha. Y, de paso, estoy aprendiendo un montón de centros de mecanizado CNC.

Salvo que el disco que tengo que usar para la tapa y la contratapa líe alguna gorda, me parece que este puede ser el último post dedicado al renacer de la Dama.

La Dama no se encuentra y se calienta

Parte del día: el error con el grupo taladro era culpa de una variable de sistema, que estaba a 0 en lugar de a 1. Corregido esto, lo siguiente fue un estropicio del 15 cuando, probando una pieza, el brazo de la herramienta principal giró 6 centímetros antes de lo previsto. Si la herramienta llega a ir más baja, me cepillo una ventosa.

Revisión de orígenes de coordenadas: Y0 desplazado 6 centímetros y pico. Reviso las hojas de configuración iniciales (unas hojas que ya amarillean y que han ido pasando de desgraciado enmarronado en desgraciado enmarronado hasta llegar a mí) y las coordenadas son correctas. O sea, que entre entonces y ahora, se desplazaron los topes del lado Y de la bancada 6 centímetros y pico hacia dentro y se cambiaron los orígenes de coordenadas, pero sin anotarlo en ninguna parte. Día de revisiones de coordenadas. Corregido el origen de Y, ajustado el de Z para el bloque taladro.

Cuando ya todo funciona, le ha dado por saltar a un magnetotérmico. Parece que el motor del depresor se calienta en exceso, le han mirado el aceite y les ha dado un patatús. La puesta en marcha se retrasa.

Mañana más, me temo.

La Dama empieza a responder

Poquito a poco y con paciencia. Es decir, a base de echarle horas al manual e intentar entender cómo funciona esto. Porque, claro, si no hay operario, para algo está el informático.

Por lo pronto, la primera en la frente: el bloque taladro no responde. El bloque taladro es la herramienta secundaria de la máquina, una serie de taladros verticales y horizontales (portabrocas, vaya) y un disco vertical. Comparten el mismo motor, con lo que cuando lo pones en marcha, pones en marcha a todos los taladros y el disco. La forma de usarlo es bajar el grupo a su posición de trabajo, ponerlo en marcha y luego bajar la herramienta concreta que vamos a usar.

La orden de bajar una de las herramientas (cualquiera) no la admite. Tampoco subirla, con lo que ningún programa funciona, ya que todos tienen entre las primeras las órdenes M180 (sube cualquier taladro) y M22 (sube el grupo taladro). La máquina se queda en Babia. Como quien se mete en un bucle infinito, vaya.

En fin, seguiremos informando. Creo que va a ser un invierno muy largo.

El problema de usar Vista

El problema de usar Vista en casa es que en el trabajo uso XP. Ya me he acostumbrado a la búsqueda integrada en el explorador de Windows y a las opciones siempre presentes de ordenación, filtrado y apilado y tengo un indexado cuidado, así que ya no sé qué es eso de ir buceando por carpetas hasta encontrar el archivo que busco.

En el XP del curro, aunque tengo instalado Windows Search 4.0, me lleva más tiempo y más pasos acotar la zona de búsqueda y tengo que abusar del botón derecho si no quiero usar la vista Detalles.

Me he acostumbrado, también, a usar el buscador integrado en el menú Inicio para buscar y ejecutar cualquier aplicación poco habitual (las habituales las tengo a mano, desde el propio menú Inicio, desde Inicio rápido o desde un gadget lanzador). En XP tengo las aplicaciones más usuales ancladas al menú Inicio, también. Y un Inicio rápido equilibrado, y una barra de herramientas personalizada con diversos accesos directos. Pero, a veces, no me queda otra que ir al fatídico Todos los programas y echarle algo de paciencia.

Ains, ¡qué pronto se acostumbra uno a lo bueno!

PD: la Dama sigue dando por saco; no reconoce las órdenes relativas al grupo taladro. Espero noticias de Italia.