Digamos que enciendo mi ordenador nuevo, veo que tiene Vista, veo que Vista no es igual que XP y las cosas no están donde antes y encima me pide permiso para instalar aplicaciones, así que, visto todo esto, apago el ordenador, maldigo a Bill Gates y digo que Vista es una mierda y que va a usarlo su…, por lo que intento instalar XP. No lo consigo, así que pregunto y pruebo Ubuntu. Es más distinto de XP que Vista, por lo que ando igual de perdido, pero en foros y blogs dicen que es mejor y más guay, así que persevero. Lo cuento a mis amistades, en foros y en blogs y todos me dan palmaditas en la espalda, me dicen que bien hecho, que tengo razón al decir que Vista es una mierda, soy popular entre las chicas y ligo más.
Pero, ¡ah, amigo!, pero si digo que después de un año usando Debian Etch como SO principal en casa (con KDE 3.5 porque Gnome siempre me ha parecido, y no digo que lo sea, tosco y anticuado), después de haber sobrevivido a todos los problemas derivados de usar una versión de prueba (incluyendo desastrosos cambios de versión de Xorg, sin quejas porque fueron culpa mía), después de todo esto, digo, decidí probar durante dos semanas el tan criticado Vista y, tras esas dos semanas, no he vuelto a Debian. Si digo eso a mis amistades, si lo cuento en foros y en blogs, soy un vendido a Microsoft, un maldito talibán sin criterio, un luser de la peor especie, un ignorante y un mentiroso porque si hubiera usado un Linux (cualquiera) de verdad jamás volvería a usar un Windows por propia voluntad (y menos Vista).